Sin duda, fue el gran maestro en el período comprendido entre 1919 y 1939.

Arthur Bricoux comenzó a interesarse en las palomas durante sus estudios universitarios, mientras asistía a la escuela de medicina, y cincuenta años más tarde, se diría que su pasión por las palomas nunca disminuyó.

En el periódo entre las guerras, ganó un increíble número de premios en el Nacional Prix y de larga distancia también. En diez años, durante el período de 1930 a través de 1939, ganó 14 primeros premios, 12 segundos, y 124 dentro de los primeros 20. Sus éxitos son tan numerosos y tan continuados que muchos aficionados pensaron que dopaba a sus aves.

Intercambió algunos pichones con el gran campeón francés, Paul Sion, y los cruces que obtuvo le diereon magníficos resultados. Dr Bricoux siempre se opuso a  las carreras de pichones demasiados jóvenes, dándoles un año de edad antes de lanzarlos a la competición.

Fue uno de los primeros en volar siguiendo el método de la viudez a gran escala, y esto le ayudó a adquirir su enorme fama durante ese período.  En cuanto a  la alimentación durante la temporada de carreras,  utiliza los frijoles, guisantes, trigo y cizaña; además del maíz, el arroz con un poco de cáñamo y la colza. Durante la temporada de la muda  utilizaba frijol, trigo, maíz, cizaña, con un poco de colza y linaza. En el invierno, utilizó cebada con profusión, avena y un poco de linaza. Estaba firmemente convencido de que la cebada es un excelente alimento para las palomas. Él siempre proporcionaba los diferentes tipos de granos por separado. No había más truco. El  Doctor Bricoux nunca se cansaba en repetir que que la canasta era la mejor juez de la capacidad de una paloma, quedando  la belleza como un  valor secundario.

Era de la opinión de que una buena paloma de larga distancia debe tener bien desarrolladas las plumas secundarias en el ala. En este sentido, también agregó:» Una paloma con un ala corta ni siquiera debería participar en la media distancia «.

Su vida estuvo realmente  dedicada a la mejora de la paloma de carreras, con un palmarés ininterrumpido de  gloria y grandes éxitos.

En el año 1940, Doctor Bricoux regresó a su hogar y encontró el mayor desastre que podría ocurrirle a un colombófilo; durante su ausencia, el ejército francés había sacrificado a  todos sus palomas .. sus maravillosas aves en la que había trabajado toda su vida, y que fueron verdaderamente su obra maestra. El golpe fue terrible, y quizás; por qué no, pudo haber sido una de la causa de su muerte prematura.

En aquellas circustancias dos amigos vinieron a ayudarle a repoblar su nuevo palomar; Néstor Tremmery de Oudenburg  y Arthur Caramin de Chatelet. La calidad de éstas palomas y la experiencia de Bricoux hacía suponer que reconstruiría la calidad de su palomar del periódo anterior pero su fallecimiento hizo que la empresa quedara sin concluir.

Lamentablemente, su hijo Arthur Jr Bricoux, no había heredado el talento del padre; además debido a la no poderle dedicarla el suficiente tiempo se vio obligado a tener un cuidador para la colonia y finalmente fue vendida en su totalidad, en noviembre de 1952, lo que permitió adquirir algunos de estas famosas palomas a los aficionados que buscaban aves del linaje puro Bricoux.

D. Bricoux, el maestro, fue probablemente el más competente criador de toda una época. No sólo tenía talento: dedicó el tiempo suficiente a su colonia para detectar el estado y la forma de cada una de sus aves.