Mediante la observación detallada y minuciosa del ojo de la paloma mensajera el criador intenta descubrir las cualidades reproductivas y competitivas de la misma, con el fin de seleccionar de forma rápida e inteligente a los mejores individuos con cierta valía para la competición. El examen y posterior selección tiene pues gran importancia a la hora de formar parejas para la reproducción, puesto que de lo contrario corremos el riesgo de aparear a palomas aptas solamente para los concursos.
Teoria del ojo en palomas mensajeras
El ojo lo conforma la pupila, el círculo de adaptación, el círculo de correlación, iris y el quinto círculo, observando el ojo de dentro hacia fuera.
- La pupila es enteramente redonda y se dilata o contrae según la intensidad de la luz a la que se halla expuesta.
- El círculo de adaptación es delgado, pudiendo alcanzar la cuarte parte, el tercio, la mitad, o envolver totalmente a la pupila. Cuanto más fino y completo sea, mejores aptitudes se le presupe al ave tanto para la reproducción como la competición. El círculo de adaptación es más difícil de discernir, pues dependiendo de la paloma, algunas parecen desprovisto de él. Si examinamos al ave a plena luz del día, la pupila se contraerá y será más cómodo su visualización.
- El círculo de correlación generalmente será de color amarillo o blanco, de tamaño medio y más delgado en palomas de fondo, incluso no poseerlo (también llamado «ojo lleno»), ya que el matiz del iris ocupa el 3er y 4º círculo.
- El iris es la parte de mayor tamaño. Se valorará en mayor grado aquellos exentos de pigmentación. A mayor intensidad del color del iris mejores aptitudes de la paloma para la reproducción y la competición. Las palomas con iris de color muy claro no conviene destinarlas a reproducción.
- El quinto círculo localizado en el borde del globo ocular aparece rodeando completamente el iris y lo poseen todas las palomas. Delgado y del mismo color por lo general que el círculo de correlación.
Buscando el ojo perfecto
Un ojo estará correctamente situado en el cráneo de la paloma cuando al trazar una línea desde el centro de la pupila, ésta encaje en la línea de separación de las dos mandíbulas del pico.
[amazon_link asins=’B077VK7LXV’ template=’ProductAd-noSombra’ store=’tuspalomas-21′ marketplace=’ES’ link_id=’a80ffddf-daeb-11e8-903a-7ddaf30e6ed5′]
La pupila pequeña es la preferida en las palomas destinadas a los concursos, ya que ella denota que es apta para toda clase de distancia. Si es muy pequeña, se clasificará para concursos de fondo y gran fondo y si, por el contrario, la pupila es muy grande demostrará que es más bien apta para distancias cortas.
Un iris granulado denotará una mejor circulación sanguínea del ave.
¿Y a partir de que momento podemos evaluar los ojos? El ave deberá tener por lo menos de 14 a 15 semanas de edad.
Los signos del ojo son útiles para obtener un porcentaje más alto de mejores palomas para los concursos que usando otros tipos de método. El problema que surge al aparear palomas con un iris muy desarrollado es que el iris de su descendencia comienzará a invadir el círculo de los signos del ojo y eventualmente los hará desaparecer. Por lo tanto es mejor aparear un ojo de reproductor con un ojo de volador el cual producirá muchos buenos voladores y raramente un reproductor.
Para aquellos que deseen profundizar en el estudio del ojo de la paloma mensajera le proponemos la publicación de D.V. Belding sobre el mismo que le servirá de guía para familiarizarse con éste técnica ciertamente compleja.
Vídeo ilustrativo de otro conocido defensor de la teoría ocular de las palomas, Rob Wooliss y aunque esté en inglés es fácilmente comprensible con las ilustraciones que incluye:
Para poder valorar con mayor precisión la calidad de una paloma en la mano nos ayudamos de otras teorías complementarias como la teoría de la cola o la teoría del ala.